Día 19– Ánimo y comunión en la misma misión
- Orlando Rodríguez Fonseca

- 31 jul
- 2 Min. de lectura
Lectura base: Gálatas 2:9
Tema: Aliento y respaldo entre creyentes guiados por la Palabra
Cuando Pablo y Bernabé se presentaron ante los líderes en Jerusalén, no recibieron desconfianza ni competencia. Recibieron la diestra. Gálatas 2:9 dice que Jacobo, Pedro y Juan “nos dieron a mí y a Bernabé la diestra de compañerismo”. Este gesto era mucho más que un saludo: era una expresión de comunión, respaldo y aliento espiritual.
Era como decir: “Estamos con ustedes. Estamos en la misma misión. Servimos al mismo Señor y predicamos el mismo evangelio.” Y ese tipo de compañerismo no nace de la simpatía humana, sino de la unidad que produce el evangelio revelado en la Palabra.
Cuando caminas bajo la dirección de la Palabra y te rodeas de otros que también la aman, encuentras ánimo real. Como dijo Pablo en Romanos 1:12: “para que mutuamente nos confortemos unos a otros por la fe que nos es común.” La fe que compartimos produce consuelo mutuo, fuerzas renovadas y propósito compartido.
En un mundo individualista, donde muchos caminan solos por orgullo o desconfianza, el evangelio nos llama a compartir la carga, a extender la mano, a animarnos en la verdad. Esa diestra de compañerismo sigue vigente hoy para todo creyente que vive en la misma gracia y predica el mismo mensaje.
Verdad para atesorar
Dios usa la comunión de los santos como medio de ánimo y afirmación para quienes caminan en la verdad del evangelio.
Oración
Señor, gracias por no dejarme caminar solo. Gracias por la comunidad de fe, por las manos que me animan y por los corazones que comparten mi pasión por ti. Ayúdame a ser también un canal de ánimo y comunión para otros. Que siempre extienda mi diestra a quienes trabajan en tu misión.
Amén.
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